¿Usas tu VOLUNTAD o tu voluntad?

¿Qué tal, cómo están ustedes amados hermanos que leen este blog?

Yo, después de largo silencio, en el que cuestiones de crecimiento personal me absorbieron, retomo la redacción.

Según lo expresado en las últimas entradas, he revisado todo el material publicado y veo que he presentado de “mil” formas, mi tema recurrente, la superación personal.

Es que evolucionar es el único camino a seguir, por todos, tarde o temprano.

Temprano: para quienes queremos vivir bien aquí y ahora.

Tarde: para quienes postergan y viven en “piloto automático”, sin tomar el mando de su existencia y viviendo a merced de voluntades  ajenas.

A manera de breve síntesis, les envío una reflexión globalizadora que es un “toque” para seguir despiertos.

(No se me agotaron los temas, hay nuevos y los seguiré dando asiduamente)

VOLUNTAD - Mente Superior.

       voluntad  - mente inferior

Tú, que lees esto y todos las personas tenemos libre albedrío, ya lo sabes. Es un derecho natural que nos dio el Creador. Mediante esa libre elección de vida, puedes hacer una de estas cosas:

1- Puedes elevarte hasta la Fuente, con persistente y determinado esfuerzo y llegar a unirte con tu Mente Superior, con tu VOLUNTAD.

2- Puedes ir hacia abajo, por ratos, al son de tu mente inferior y por ratos elevarte.

3- Puedes vivir ignorando a tu Mente Superior y vivir sólo según tu voluntad inferior, que viene de tu mente inferior (como elige el hombre vulgar).

Siempre que la mente puede desconectarse de pensamientos y deseos inferiores, el Guía Interno puede ejercer la VOLUNTAD, que libera de padecimientos.

Se trata de subyugar al yo humano o pequeño ego, por más que éste se rebele y luche por imponerse.

Cada individuo está formado por el Ser Superior que Es y por su parte inferior o animal.

Cuando domina tu VOLUNTAD, eres el jinete que puede “montar”a su naturaleza inferior.

En cambio, cuando los remolinos de la personalidad, los temporales de los deseos o apetitos, se agitan a nuestro alrededor, somos arrastrados de un lado a otro y la Mente Superior no puede gobernar.

Sólo imponiendo quietud a la mente, a los deseos, a las actividades, se puede reproducir en lo interior, la imagen de lo Superior.

Vivir según la VOLUNTAD del Creador (no es algo despótico) sino vivir según Su Propósito al crearnos: ser felices y expandirlo, contribuyendo al bienestar de la Creación.