Afortunadamente se dio a la humanidad el conocimiento de la Llama Violeta para poder limpiar a nuestro planeta
de la contaminación producida en muchos siglos, en que se usó mal la Energía.
Sepamos que estamos aquí para
evolucionar y desarrollar el Cristo Interno, perfeccionando así,
nuestro diario vivir y nuestro cuerpo material. Esto es lo que debe comprender
y hacer toda la humanidad.
Es hora de libertad, ¡debemos LIBERARNOS!
Para cualquier situación presente
o pasada, propia o ajena, individual o colectiva, se puede usar este decreto,
repitiéndolo tres veces:
“Yo Soy la Ley del Perdón y la
Llama Violeta que transmuta todos los errores cometidos por mí y por toda la
humanidad”
Al hacer esta invocación, se
despierta el Ser Interior de muchas personas que tal vez lo tengan dormido. Es la gran oportunidad que esos Cristos
esperan para empezar a actuar.
En general, los cuerpos o vehículos, físico, mental y emocional están en estado
caótico y necesitamos trabajar mucho con LLAMA VIOLETA para purificarlos.
También es muy necesario
envolverse uno mismo con la Llama Violeta lo más posible, usarla tal como usamos el agua y también invocar
el Manto de Luz Blanca Incandescente que vemos en la Lámina de la Presencia Yo Soy. Este
Manto se cierra cuando lo pedimos de esta forma:
“Amada Presencia de Dios en mí,
cierra mi Manto de Luz Blanca Incandescente que me hace invisible e invencible para toda creación humana
imperfecta. Gracias”.
De este modo, nada menor que la
Luz podrá acercársenos.
Es imperativo usar la Llama
Violeta Consumidora.
Para comprender mejor como
funciona esta Llama, pensemos en una llama física: encender una vela y
observarla. Primero el calor va ablandando, derritiendo la cera y luego la va
consumiendo hasta que desaparece.
De igual modo actúa la Llama
Violeta con las sustancias impuras de nuestros cuerpos pero con la diferencia
de que la Llama Violeta no quema el cuerpo con calor, porque es una Llama no
física, sino de una dimensión más elevada.
Ella actúa en los átomos,
disolviendo las impurezas y de este modo aumenta la vibración de los
electrones, su movimiento se hace más rápido y ya no pueden existir las
discordias ni las imperfecciones. Esta es la acción del Perdón y la
Misericordia que disuelve errores, limpiando a los átomos que pueden estar
contaminados con pensamientos, sentimientos y grabaciones erróneas.
La forma de usarla es muy
sencilla. Proceder haciendo la invocación ya dada:
“Yo Soy la Ley del Perdón y la Llama Violeta
que transmuta todos los errores cometidos por mí y por toda la humanidad”.
Luego cerrar los ojos, concentrar
la mente y tratar de visualizar
esa llama. Sostener la mente fija
en la Divina Presencia y Orar pidiendo que se manifieste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario