Amadísimo cuerpo
físico mío, en el nombre de la Amada y Todopoderosa Presencia de Dios “YO SOY el que SOY en mí, a la que sirves de Templo, te
bendigo. Te doy gracias por el servicio invalorable que me prestas al
permitirme cumplir mi misión en este plano físico de Luz.
Esto hace posible
la evolución de mi Alma y mi Espíritu.
Reconozco y acepto
tu inteligencia capaz de recibir y ejecutar una orden y por ello te recuerdo la
obligación que tienes, de manifestar armonía y equilibrio.
Ahora en nombre de
mi Ser Divino Crístico dentro de mi corazón, te ordeno amorosamente renovar y
regenerar todas las células moléculas y átomos que integran todos mis (sus)
órganos aparatos y sistemas, eliminando así toda apariencia negativa y
manifestando la perfección ahora.
Bendigo y doy
gracias al Elemental que trabaja en mí (en …) por su cooperación.
Gracias Amado
cuerpo físico por la realización perfecta de esta orden.
Gracias Padre-Madre
por permitirme ordenar en tu nombre.
GRACIAS GRACIAS GRACIAS!
AMEN! ASI SEA y ASI ES!
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