Sí…hoy
bajamos 2 persianas: una de cosas difíciles a superar, perdonar, olvidar. La
otra, la de los triunfos, lo bueno: eso sí será muy
bueno evocarlo, capitalizarlo para sentirnos muy estimulados por todo lo que
logramos aprender, crear, enfrentar…
Hasta podríamos decirnos:
”¡Me felicito, qué capaz soy, qué fortaleza tengo, cuánta
constancia puse, cuánta iluminación recibí. Gracias, muchas Gracias”.
También
digo de mi parte a ustedes:
Gracias, mil gracias, por estar, por buscar el
contacto persona a persona día tras día, a través de estos escritos, por darme
la oportunidad de servir, que es la razón de mi estada en esta hermosa Tierra.
De Verdad les digo: sin ustedes, mi tarea no tendría
sentido.
De todo corazón un fuerte, grande, fraternal abrazo
universal para todos mis hermanos del mundo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario