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miércoles, 18 de mayo de 2016

NO MUERAS A LOS 30- Fragmento de 'Un Dios que puede bailar’.

Compartamos hermanos, esta maravillosa enseñanza de vida, (mientras mi manita sigue recuperándose)
La mayoría de la gente muere alrededor de los 30 años, aunque su “muerte” ocurra alrededor de los 80.
Durante 50 años aparentan vivir, pero en ellos no hay vida, no hay canción, no hay danza.
¿Por qué están viviendo? No lo saben.
¿Quiénes son? Nunca se lo han preguntado.
¿Por qué están aquí, de dónde han venido, a dónde van? Te dirán: 'No preguntes eso altera nuestra paz y no importa de dónde venimos y a dónde vamos'.
No están interesados en sus propias raíces ni es sus propias flores.

Sólo es posible encontrar hombre viviente en el momento de su “muerte” real, si sigues creciendo... si sigues descubriendo... si sigues amando... si sigues cantando... si sigues bailando... si nunca pierdes el interés... si nunca pierdes el asombro ante la existencia... si tienes los ojos de un niño inocente, tan llenos de asombro que todas y cada una de las cosas son para ti un misterio...
Entonces vivirás hasta el fin de esta vida y más: un hombre así no conoce la “muerte”.
La “muerte” le ocurre sólo a los muertos.
Si un hombre ha estado vivo, lleno de fuego, lleno de juventud, su último suspiro será sólo dejar el cuerpo.
Su conciencia que está tan viva, sigue danzando hacia otra forma, a un nivel más alto.
Para él no hay “muerte”, sólo liberación de una prisión.
Estaba confinado en un cuerpo pequeño, destinado a envejecer y enfermar y ahora está libre de él y va hacia otro cuerpo fresco y nuevo. 
Será parte de la vida Universal, sin forma, infinita y eterna.
Ese es su verdadero hogar: la inmortalidad, la eternidad, la existencia universal.

       Fragmento de Zarathustra 'Un Dios que puede bailar’.

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