En nuestra tarea de mejorar nuestro vivir no puede estar ausente la consideración sobre nuestra salud.
Actualmente, la humanidad sufre de innumerables molestias que van en aumento, hasta llegar a producir, en algunos casos todo tipo de dolencias graves.
También en esto tiene mucho que ver nuestra actitud frente a la vida, frente a todas las situaciones del diaro vivir.
La enfermedad tiene relación con la desarmonía de cada persona. Allí se encuentra la causa de nuestros males y por ende, es allí donde nuestro actuar es de fundamental importancia.
Lo que la mente causa, la mente puede curarlo. ¿Qué quiere decir esto? Que si hay desarmonía en nuestra persona, se producen una serie de desequilibrios químicos y fisiológicos que alteran al organismo.
Es muy grande el poder de la mente sobre el bienestar físico, del mismo modo que influyen los conflictos emocionales no resueltos, causando malestares de todo tipo.
Una mente liberada de temores, angustia, ansiedad, remordimientos, culpas, hace que el físico funcione sin trabas, sin obstrucciones o bloqueos energéticos.
El libre fluir de la energía pura de nuestra mente es un baño de bienestar para nuestras células.
La enfermedad desaparece cuando desparece la causa y la causa está en uno mismo. Cuando bajan nuestras defensas aparece la enfermedad y estas defensas bajan cuando nos desarmonizamos.
También en esto tiene mucho que ver nuestra actitud frente a la vida, frente a todas las situaciones del diaro vivir.
La enfermedad tiene relación con la desarmonía de cada persona. Allí se encuentra la causa de nuestros males y por ende, es allí donde nuestro actuar es de fundamental importancia.
Lo que la mente causa, la mente puede curarlo. ¿Qué quiere decir esto? Que si hay desarmonía en nuestra persona, se producen una serie de desequilibrios químicos y fisiológicos que alteran al organismo.
Es muy grande el poder de la mente sobre el bienestar físico, del mismo modo que influyen los conflictos emocionales no resueltos, causando malestares de todo tipo.
Una mente liberada de temores, angustia, ansiedad, remordimientos, culpas, hace que el físico funcione sin trabas, sin obstrucciones o bloqueos energéticos.
El libre fluir de la energía pura de nuestra mente es un baño de bienestar para nuestras células.
La enfermedad desaparece cuando desparece la causa y la causa está en uno mismo. Cuando bajan nuestras defensas aparece la enfermedad y estas defensas bajan cuando nos desarmonizamos.
¿Es posible vivir armonizados y por consiguiente sanos, en este mundo, aquí y ahora?
En la próxima entrada se completará este tema
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