Para tratar un órgano (ejercicio)
Ver el sistema nervioso en una lámina. Identificar la zona afectada viendo los nervios que la recorren. Luego reconstituir la zona dañada visualizando Luz en esa sección, la que reparará el daño. Cuanta más Luz sea conscientemente dirigida a los electrones del órgano dañado, más rápido se curará.
Examinar la causa mental-emocional que ha dañado el sistema nervioso en esa sección. Pedir a la Presencia Yo Soy, al Cristo Interno, con verdadera sinceridad que nos revele las condiciones de nuestro cuerpo mental-etérico-emocional, responsables del daño.
Decreto: “En el nombre de mi Amada Presencia Yo Soy, demando que cese la discordia en mis cuerpos y en los cuerpos de toda la humanidad”
(Discordia es toda vibración destructiva, cuyo efecto es similar al choque de platillos).
Si persiste la afección
Debemos hablar a nuestros órganos, ya que ellos son vida inteligente, oyente, obediente y decirles:
“Esta imperfección que veo en ti, no es la Verdad porque mi verdadero Ser es Perfecto. Borro todo lo mal hecho por mi mente externa y sólo acepto la Perfección manifestada”. Gracias Padre-Madre.
Decreto: “Yo Soy la única y Perfecta Energía que actúa y gobierna aquí por lo tanto toda apariencia de imperfección es instantáneamente corregida”. ¡Gracias!
Habrá que repetir hasta que uno esté convencido de que eso se está corrigiendo.
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