Vivir en plenitud, aquí y ahora, superando problemas y limitaciones, suele parecer una utopía. Sin embargo, es posible cuando reconocemos que nuestros sufrimientos son efectos, causados por nuestra mente y que por lo tanto podemos cambiar, para tener efectos felices.
Todo el secreto de una vida feliz reside en adquirir Sabiduría y para obtenerla, sólo hacen falta unas pocas y útiles enseñanzas, aplicadas al diario vivir.
La Sabiduría es nada más y nada menos que el empleo del sentido común, que suele ser el menos común de los sentidos, el que menos empleamos.
En realidad, para evitar los padecimientos y para producir mejoras en todas nuestras condiciones de vida, debemos saber que las causas están en nuestros cuerpos invisibles; el mental, el emocional y el etérico. El Supremo Creador nos hizo Perfectos, nos dio todo el “Equipo” necesario para poder vivir expresando Su Perfección.
Cuando vinimos a habitar el Plano Físico nos fuimos revistiendo de cuerpos cada vez más densos pero ahora debemos hacer el proceso inverso, desvestirnos de los cuerpos densos, dejar ya de identificarnos con los cuatro cuerpos inferiores que forman la personalidad o yo humano. Soltar toda complicación y pre-ocupación. No enredarnos en problemas ni en interminables pro y contra, ya que todo eso perturba, desgasta, desalienta, confunde y entorpece.
El vivir con simplicidad anula los “ruidos” que sofocan, la Voz Interior y en el Silencio, “la Voz” puede hacerse oír.
Enfoca las energías sólo en tus propósitos.
Todo el Poder Universal nos asiste para nuestras realizaciones cuando lo invocamos y apartamos las trabas del mental inferior.
La vida simple es dejarse conducir por la energía Interna, dejarla que fluya libremente, ésta es la llave simple de la felicidad.
Pero sucede a veces que debido a nuestros hábitos de pensamiento, de querer tener todo bajo el control, es bastante común sentir temor a realizar esta entrega.
Sentimos que la vida es como un abismo. Pero debemos tener en cuenta que este “abismo” es Divino, porque allí reina El Creador, que nos guía, nos provee y nos cuida porque nos Ama incondicionalmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario