¿Qué es mejor, trabajar en el crecimiento espiritual solo, en la paz personal, evitando así los choques con otras personas o unirse para trabajar en grupo, dando las propias energías para el bien del todo?
Cada persona debe elegir si usará sus energías en los trabajos grupales o si intentará recorrer solo el Camino Espiritual.
Es su corazón quien debe elegir e impulsarlo al trabajo voluntario cooperativo. Si no está plenamente convencido de que está dispuesto a hacer este trabajo, es mejor que no lo haga, ya que será un engranaje que no funcionará bien, perjudicando al grupo.
Indudablemente es más fácil, requiere menos esfuerzo, el manejarse solo, ya que la asociación con otras personas suele resultar difícil, debido a las diferencias que hay en las personalidades. Sin embargo es una disciplina maravillosa para la personalidad, la de aprender, en grupo, armonizándose con los integrantes del mismo y con el propósito grupal.
"Ningún hombre conoce su propia fuerza y Maestría, hasta que ha probado realmente mezclándose con otras personas, tan imperfectas como él mismo".
Cuando una persona se integra a un grupo debe saber que está comprometida a aportar su tolerancia, armonía, su paz, comprensión, cooperación, entusiasmo, Fe y todo lo que pueda, a través de su Presencia “Yo Soy”.
Lo mejor es entenderse con las personas del grupo, ya que así se moderan las personalidades.
Continúa
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